Venga, lo tomamos mientras vemos los relojes que os traigo de mis excursiones por las galaxias internéticas (palabra inventada para la ocasión) y os aseguro que quedan monísimos en cualquier blog que se precie.
Algunas ya tenéis pero por si os gusta cambiar, ahí os los dejo.
Ah! Y nuestra fiel y abnegada seguidora, a ver si se anima a instalar su propio saloncito pa recibir visitas...
Ya estoy sentada esperando ese cafetín oloroso y humeante. También huelo las ricas y esponjosas pastas que ha horneado Mar Cantábrico.
ResponderEliminarLos relojes los dejamos de momento y mientras tomamos el café que no marquen las horas.
¡¡¡Cuántas cosiquines!!! Qúe entretenido estás.
ResponderEliminarYa veo que hasta nos cuentas, ¿¡¡¡ja,ja,ja,ja....!!!
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