sábado, 18 de diciembre de 2010

Corre caballito!.

Me encantan los villancicos navideños, ingenuos, con sus borriquitos y caballitos que van a Belén, que hablan del niño Jesús, María, José, de la estrella que descubren primero humildes pastores y después tres estupendos y previsores reyes magos, atentos a acudir a ver que sucede y no precisamente con las manos vacías. Si sirven para conectar un segundo con todo lo bueno que hay en cada uno, si logran que revivamos retazos de nuestra infancia feliz, ya cumplen con creces su misión.

Ah! Y os deseo a todos

FELIZ NAVIDAD