Los acantilados de la costa cantábrica son espectaculares y si no, véase esta imagen de la costa de Llanes, en el lugar donde el "Bramadoriu" ruge y escupe con furia ráfagas de agua marina, los famosos bufones. Las grietas por donde escapa el vapor de agua, impulsado por la fuerza de las olas y las altas mareas son todo un espectáculo que no debe perderse.
Queridísimos compis, creo que ya es hora de prepararnos para los placeres del ocio y el descanso veraniego que tanto nos merecemos, por lo que aquí os queda una de mis aportaciones para cuando llegue la ocasión. No importa si ya lo conocemos, volver es descubrir de nuevo todo un precioso paisaje y aprovechemos para mostrárselo a algún amigo.
Pero, eso si, sigamos soñando y disfrutando de la vida segundo a segundo. Besitos pa todos!!
(No se por qué me queda ese pedacito de texto ahí arriba...tendré que preguntárselo al profe.)